El Coliseo romano, también conocido como Anfiteatro de Flavio, fue inaugurado en el año 80 por el emperador Tito aunque el inicio de su construcción data del 72 a.C. Es el más célebre de los monumentos romanos de la época del Imperio. En el muro exterior se pueden apreciar columnas jónicas, corintas y dóricas (en la parte superior una gran carpa protegía a los espectadores del sol), el velarium, las entradas con sus 80 arcos numerados que permitían la entrada a el pueblo. Enormes galerías internas permitían el acomodo en 10 minutos de los espectadores. En el interior se pueden ver la gran plataforma o podio donde se sentaba el emperador y los miembros de las clases adineradas y el vomitorium que era la salida numerada de cada sección y se dice que tomó su nombre de una gigantesca estatua de bronce del coloso que se alzaba junto al anfiteatro. Esta edificación, que ha visto innumerables combates de gladiadores y fieras. Tiene 57 metros de altura y una capacidad para acoger 50.000 personas. Dirección: Anfiteatro Flavio (Piazza del Coliseo).
La ruta que a continuación voy a describir es quizás una de las más duras
que he hecho nunca. Su dificultad, es por diferentes motivos: está sin
señalizar,...
3 comentarios:
No me extraña que este lugar fuese confirmado como una de las siete maravillas del mundo 2007, si tienes el privilegio de visitarlo lo comprobarás tu misma. Cuando entras en el Coliseo te quedas de verdad impresionado, podrás ver la arena, las gradas, vas a retroceder en el tiempo y te sentirás como un romano de la época. Imprescindible visita guiada.
No me extraña que este lugar fuese confirmado como una de las siete maravillas del mundo 2007, si tienes el privilegio de visitarlo lo comprobarás tu misma. Cuando entras en el Coliseo te quedas de verdad impresionado, podrás ver la arena, las gradas, vas a retroceder en el tiempo y te sentirás como un romano de la época. Imprescindible visita guiada.
Visita obligada con guía, entre los muros de arena y los fosos te harán retroceder en el tiempo hasta sentirte como un romano de la época. No me extraña que haya sido elegido en el año 2007 como una de las 7 maravillas del mundo.
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